Política transnacional: entre el activismo y el arte
Los mexicanos que participan en la política nacional desde Bruselas y París
Las poblaciones migrantes tienen el poder de participar en la política de su país de origen desde el extranjero. En efecto, los migrantes son agentes con capacidad y habilidad para elaborar estrategias transnacionales con el fin de responder a las crisis humanitarias y otros problemas sociopolíticos enfrentados por sus países de origen desde el extranjero. Concretamente, pueden participar en la política de su país de origen mediante campañas transnacionales, votaciones extraterritoriales, esfuerzos de concienciación, protestas e incluso manifestaciones artísticas.
Esta exposición forma parte de un estudio etnográfico realizado entre 2014 y 2018 en la comunidad mexicana en Bruselas y París. La finalidad de este trabajo ha sido lograr una mejor comprensión de las formas y el proceso por el cual las comunidades de migrantes participan en la política de sus países de origen desde el extranjero.
El contexto específico de inseguridad en México, la violencia desenfrenada desde la declaración de la guerra contra las drogas y las violaciones de los derechos humanos han desencadenado la movilización política de la población mexicana en el mundo entero. En efecto, los miembros de la sociedad civil mexicana han organizado movimientos nacionales y transnacionales (por ejemplo, #YoSoy132 en 2012 [1] y Ayotzinapa en 2014 [2]) para denunciar la incapacidad del gobierno mexicano para respetar el Estado de derecho y ofrecer seguridad a sus ciudadanos. Además de la voluntad de la sociedad mexicana de denunciar el contexto de violencia e impunidad que afecta a su país, los mexicanos también se movilizaron intensamente tras el terremoto de septiembre de 2017 y para las elecciones presidenciales de julio de 2018.
Esta serie de fotos muestra diferentes estrategias de movilización política transnacional desplegadas por los activistas mexicanos que viven en Bruselas y París. Durante mi trabajo de campo, logré capturar la relevancia y el uso de diversas prácticas artísticas tales como la música, la danza, el bordado y la pintura como medio de expresión dentro de la reivindicación de demandas políticas a nivel transnacional.
[1] El movimiento #YoSoy132 fue una protesta organizada por estudiantes en México para denunciar la colusión entre los dos grupos televisivos más grandes, la élite económica y el expresidente Enrique Peña Nieto durante la campaña de las elecciones presidenciales de 2012.
[2] El 26 de septiembre de 2014, 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa fueron secuestrados y luego desaparecieron en el Estado de Guerrero, México.
Los mexicanos que participan en la política nacional desde Bruselas y París
Las poblaciones migrantes tienen el poder de participar en la política de su país de origen desde el extranjero. En efecto, los migrantes son agentes con capacidad y habilidad para elaborar estrategias transnacionales con el fin de responder a las crisis humanitarias y otros problemas sociopolíticos enfrentados por sus países de origen desde el extranjero. Concretamente, pueden participar en la política de su país de origen mediante campañas transnacionales, votaciones extraterritoriales, esfuerzos de concienciación, protestas e incluso manifestaciones artísticas.
Esta exposición forma parte de un estudio etnográfico realizado entre 2014 y 2018 en la comunidad mexicana en Bruselas y París. La finalidad de este trabajo ha sido lograr una mejor comprensión de las formas y el proceso por el cual las comunidades de migrantes participan en la política de sus países de origen desde el extranjero.
El contexto específico de inseguridad en México, la violencia desenfrenada desde la declaración de la guerra contra las drogas y las violaciones de los derechos humanos han desencadenado la movilización política de la población mexicana en el mundo entero. En efecto, los miembros de la sociedad civil mexicana han organizado movimientos nacionales y transnacionales (por ejemplo, #YoSoy132 en 2012 [1] y Ayotzinapa en 2014 [2]) para denunciar la incapacidad del gobierno mexicano para respetar el Estado de derecho y ofrecer seguridad a sus ciudadanos. Además de la voluntad de la sociedad mexicana de denunciar el contexto de violencia e impunidad que afecta a su país, los mexicanos también se movilizaron intensamente tras el terremoto de septiembre de 2017 y para las elecciones presidenciales de julio de 2018.
Esta serie de fotos muestra diferentes estrategias de movilización política transnacional desplegadas por los activistas mexicanos que viven en Bruselas y París. Durante mi trabajo de campo, logré capturar la relevancia y el uso de diversas prácticas artísticas tales como la música, la danza, el bordado y la pintura como medio de expresión dentro de la reivindicación de demandas políticas a nivel transnacional.
[1] El movimiento #YoSoy132 fue una protesta organizada por estudiantes en México para denunciar la colusión entre los dos grupos televisivos más grandes, la élite económica y el expresidente Enrique Peña Nieto durante la campaña de las elecciones presidenciales de 2012.
[2] El 26 de septiembre de 2014, 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa fueron secuestrados y luego desaparecieron en el Estado de Guerrero, México.
Rituales, artefactos e identidad
Los migrantes mexicanos utilizan rituales, artefactos y festividades nacionales para reforzar su identidad como miembros de la diáspora mexicana y como actores políticos transnacionales. Por ejemplo, los activistas mexicanos aprovechan las festividades nacionales mexicanas para organizar festivales culturales en los que transmiten mensajes políticos y denuncian la violencia y la impunidad en su país de origen. Los migrantes mexicanos han logrado adaptar artefactos y elementos nacionales tales como rituales, instrumentos musicales, artesanías y platillos mexicanos a su movilización social con el fin de reforzar su identidad y dar un carácter festivo y convival a sus demandas políticas.
Los migrantes mexicanos utilizan rituales, artefactos y festividades nacionales para reforzar su identidad como miembros de la diáspora mexicana y como actores políticos transnacionales. Por ejemplo, los activistas mexicanos aprovechan las festividades nacionales mexicanas para organizar festivales culturales en los que transmiten mensajes políticos y denuncian la violencia y la impunidad en su país de origen. Los migrantes mexicanos han logrado adaptar artefactos y elementos nacionales tales como rituales, instrumentos musicales, artesanías y platillos mexicanos a su movilización social con el fin de reforzar su identidad y dar un carácter festivo y convival a sus demandas políticas.
Arte y creatividad en la política
Los activistas mexicanos en Bélgica y Francia utilizan las prácticas artísticas como instrumentos para comprometerse políticamente desde el extranjero. Adaptan sus aptitudes personales para idear formas creativas de protesta a través de las cuales pueden expresar sus demandas políticas y desarrollar espacios libres para el diálogo y la reflexión. Por medio de representaciones artísticas como la música, el teatro, la danza y la pintura, los migrantes mexicanos reinterpretan las expresiones culturales de su país de origen y las adaptan en su país de acogida para movilizarse transnacionalmente. Asimismo, reconocen el uso instrumental de las artes cuando se movilizan políticamente, ya que la originalidad de sus obras atrae a los actores que se encuentran en su país de destino. Además, las estrategias basadas en el arte también les permiten reforzar su identidad cultural como miembros de la diáspora mexicana, creando al mismo tiempo espacios que incitan a la reflexión política y a la socialización.
Los activistas mexicanos en Bélgica y Francia utilizan las prácticas artísticas como instrumentos para comprometerse políticamente desde el extranjero. Adaptan sus aptitudes personales para idear formas creativas de protesta a través de las cuales pueden expresar sus demandas políticas y desarrollar espacios libres para el diálogo y la reflexión. Por medio de representaciones artísticas como la música, el teatro, la danza y la pintura, los migrantes mexicanos reinterpretan las expresiones culturales de su país de origen y las adaptan en su país de acogida para movilizarse transnacionalmente. Asimismo, reconocen el uso instrumental de las artes cuando se movilizan políticamente, ya que la originalidad de sus obras atrae a los actores que se encuentran en su país de destino. Además, las estrategias basadas en el arte también les permiten reforzar su identidad cultural como miembros de la diáspora mexicana, creando al mismo tiempo espacios que incitan a la reflexión política y a la socialización.
Protestas y política electoral
Durante el período del estudio, los migrantes mexicanos participaron en la política electoral y organizaron protestas. Por ejemplo, en 2018, México celebró elecciones para diversos cargos gubernamentales, incluyendo la presidencia y escaños en los congresos estatales y federal. Por primera vez, candidatos independientes no afiliados a ningún partido político pudieron presentarse a la presidencia siempre y cuando cumplieran con los requisitos legales establecidos por el Instituto Nacional Electoral de México. Durante la campaña electoral, los migrantes mexicanos organizaron manifestaciones y reuniones públicas para apoyar a su candidato o para denunciar el contexto de violencia en su país de origen. Sin embargo, para concretizar todo tipo de protesta pública, los organizadores debieron notificar a las autoridades correspondientes en Bruselas o en París. Por lo tanto, el activismo transnacional de los migrantes mexicanos no sólo se rige por las normas de su país de origen, sino también por las normas jurídicas y políticas de su país de residencia.
Durante el período del estudio, los migrantes mexicanos participaron en la política electoral y organizaron protestas. Por ejemplo, en 2018, México celebró elecciones para diversos cargos gubernamentales, incluyendo la presidencia y escaños en los congresos estatales y federal. Por primera vez, candidatos independientes no afiliados a ningún partido político pudieron presentarse a la presidencia siempre y cuando cumplieran con los requisitos legales establecidos por el Instituto Nacional Electoral de México. Durante la campaña electoral, los migrantes mexicanos organizaron manifestaciones y reuniones públicas para apoyar a su candidato o para denunciar el contexto de violencia en su país de origen. Sin embargo, para concretizar todo tipo de protesta pública, los organizadores debieron notificar a las autoridades correspondientes en Bruselas o en París. Por lo tanto, el activismo transnacional de los migrantes mexicanos no sólo se rige por las normas de su país de origen, sino también por las normas jurídicas y políticas de su país de residencia.
